Tiene una de esas típicas casas inglesas de dos pisos y con el típico 'tres ventanas'. Están sentados en un banquito adosado a estas y se besan despacio como intentando que el tiempo pase lento, y no por nada, solo por el hecho de estar besándose hasta que se acabe el día.
-No tengo nada mejor que hacer.- decía entre beso y beso.
-Tampoco yo.- contestaba él en un susurro.
Estaban tan perdidos que ni si quiera les importaba no haber comido desde hacía horas, o estar a la vista de todos.
-¿Por qué hacemos esto?
-Por falta de sentimientos.
-¿Qué quieres decir?- dice, separándose de sus labios hinchados.- ¿Es un consuelo?
-Estoy segura, sí. Estamos solos y ahí fuera hace un día de perros. Yo te invito a tequilas con limón y a que me beses hasta que se te cure el corazón.
-Mi corazón está bien.
-Entonces, ¿por qué sigues aquí?- Dice en un susurro.
Abre los ojos respirando con dificultad pasándose la mano por el pelo. Se sienta en la cama con los pies apoyados en el suelo y se masajea la nuca pensativo.
-Quien demonios eres y por qué te cuelas en mis sueños, tequila.
5 mindstream:
El alcohol más tu cerebro intentando joder a tu corazón es una mal combinación.
Me gustó el giro que le diste a la historia, no me lo esperaba.
Besos de neón.
Pues que se duerma y que siga soñando, que el sueño parece bonito.
PD: Me gustaba más la cabecera donde te veías tan tan guapis, chiquita
Creo que el título lo viene que ni pintado a la entrada. El tequila nunca, nunca, nunca cura las heridas bien, lo que es una pena!
Te sigo : )
El tequila... el alcohol juega malas pasadas, pero hay que pasar por todo
besots:)
Me gustó.
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